Ambas proceden de Córdoba y se conocieron en el centro murciano, uno de los más activos de la Casa de España de esta populosa ciudad argentina. Ahora comparten piso en Cartagena, a donde han llegado con becas Golondrina para descendientes de emigrantes de la Región de Murcia. La rectora de la UPCT, Beatriz Miguel, y el consejero de Transparencia, Antonio Sánchez, han dado hoy la bienvenida a las estudiantes.
“Es una suerte disfrutar de esta ayuda y poder conocer nuestras raíces y visitar a nuestros parientes aquí”, resalta Sophia Armesto, estudiante de Arquitectura de 22 años y cuyos abuelos maternos, oriundos de la ciudad de Murcia, emigraron a Argentina “en busca de oportunidades”.
“Mi abuela era de Alcantarilla y mis hermanos ya vinieron en 2020 con beca Golondrina a la Universidad de Murcia”, comenta Sofía Flaherty, alumna de Ingeniería Industrial de 20 años.
La historia de los antiguos edificios militares que ahora albergan centros universitarios, y su ubicación junto al centro de la ciudad y el puerto son algunas de las primeras impresiones que destacan ambas de la Politécnica de Cartagena.
El programa Golondrina, subvencionado por la Dirección General de Gobierno Abierto y Cooperación de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, destinado a estudiantes murcianos o descendientes de murcianos residentes en el exterior (Europa o América), que deseen cursar estudios de grado, máster o doctorado.
'Golondrina' pretende ofrecer a los murcianos y sus descendientes, residentes en el exterior, la oportunidad de retornar a Murcia, por motivos académicos y socioculturales, así como reforzar los vínculos existentes entre los murcianos, más allá de los límites de la Región, gracias a la concesión de unas becas.
Desde que comenzó el programa ya han estudiado en la UPCT una decena de alumnos descendientes de murcianos residentes en el exterior. La mayoría de ellos ha cursado estudios de Arquitectura, Ingeniería Industrial e Ingeniería Agrónoma.